En el barrio Mariano Moreno de La Quiaca, la colaboración entre municipio y vecinos dejó no solo mejoras urbanas, sino también un gesto cargado de identidad norteña y gratitud.
Durante la jornada, cuadrillas municipales junto al intendente Dante Velázquez trabajaron en la apertura de calles, limpieza y mejoras en la accesibilidad del sector. Vecinos acompañaron en todo momento, organizándose para colaborar en las tareas y demostrar que el progreso se construye con trabajo en conjunto.

Al caer la tarde, y como una forma de agradecer el esfuerzo de los trabajadores municipales, los vecinos sorprendieron con la elaboración de panes caseros cocidos en horno de barro, compartidos entre todos para reponer energías y cerrar la jornada con un espíritu comunitario.
“Fue un gesto maravilloso, un símbolo de reciprocidad que demuestra que el camino colectivo es el que siempre dará frutos”, destacaron desde la gestión municipal. La jornada reafirmó que el trabajo mancomunado, la solidaridad y la empatía son pilares para transformar la ciudad.
El encuentro no solo mejoró la infraestructura barrial, sino que también fortaleció los lazos entre municipio y vecinos, dejando en claro que las obras más significativas son las que nacen desde la unidad y el agradecimiento mutuo.
