Con notables capacidades militares se integró a las fuerzas de Güemes, y luego formó parte del ejército, luchando a las órdenes del General Manuel Belgrano, como coronel mayor, liderando combates que resultaron fundamentales y que cimentaron el camino a la independencia de nuestra Patria.
Jujuy, por su ubicación estratégica, resultó ser un escenario permanente de combates, en los que las fuerzas criollas resistieron el avance realista con inestimable valor y coraje.
La provincia fue devastada de manera reiterada y no obstante ello, se rearmaba y se entregaba con renovadas energías a las batallas que finalmente nos dieron la libertad.
En ese contexto, Arias lideró más de 40 combates en la zona de la Quebrada, en Jujuy. En este punto fue emblemático el combate librado el 1 de marzo en la localidad de Humahuaca, oportunidad en la que Arias comandó su fuerza para recuperar la ciudad que había sido invadida por el ejército realista a órdenes de De la Serna.
Tanta importancia tuvo este combate que el General Manuel Belgrano efectuó un reconocimiento a sus méritos por la acción exitosa y lo ascendió luego al grado de Coronel, que fuera ascendido post mortem al grado de General por parte del Poder Ejecutivo a través del Decreto Nro. 838/2016.
Los valores que encarna su figura, su capacidad de entrega y sacrificio, el anteponer la independencia de la Patria y su amor por ella a todo otro interés, constituyeron méritos suficientes para que como un acto de justicia, el Congreso de la Nación, lo declarase héroe nacional y que su nombre y su obra sean conocidos en toda la extensión de nuestro país, mediante Ley N°1204-D-2018.