La Quiaca 28 de noviembre 2021 // El jueves pasado, tras dos semanas de ausencia injustificada, por parte del Intendente Blas Gallardo; la presidente del Concejo Deliberante Felisa Nieve; en conferencia de prensa, ante la falta de acreditación de motivos válidos para justificar la salida de Gallardo; comunicó que asumirá la Intendencia a Cargo con todas sus facultades; cambiando el gabinete, para reestablecer las jerarquías y funciones del poder ejecutivo, como del legislativo local; ya que la negativa de presentarse a trabajar por parte del jefe comunal, es una treta política; con la única intención de impedir el normal funcionamiento del CD.
Gallardo se encuentra hasta el 10 de diciembre en minoría en el cuerpo deliberativo; desde ese día, con la renovación de autoridades contará con la mayoría parlamentaria, por lo que se advierte reaparecerá cuando juren los concejales oficialistas; habiendo incumplido con sus deberes de funcionario público mientras tanto, aprovechando los grises que el sistema constitucional exhibe; ya que Nieve hasta la fecha jamás pudo asumir la plenitud de sus facultades.
Desde el día viernes pudo observarse el peso hegemonía mediática con la que cuenta Blas Gallardo; tanto en el orden local, provincial y nacional; donde la prensa funcional instaló que Felisa Nieve ejecutó un golpe institucional; ni siquiera usaron el verbo en potencial, aseguraron que el hecho estaba consumado, subestimando la capacidad crítica de los ciudadanos de La Quiaca.
Aquel día, Nieve se presentó, tal cual lo anticipó, pero se encontró con un municipio cerrado. Un muro de militantes del FdT la insultó con absoluta bajeza; incluidos funcionarios; violando la ley Micaela ante los ojos de toda una comunidad y las reglas del decoro de la vida en sociedad; el pueblo azorado pudo constatar en tiempo real el ultraje.
El certificado médico que presentó fuera de término Gallardo ante el CD, no establece ninguna recomendación de reposo que justifique un tratamiento prolongado; en consecuencia, Nieve actuó conforme a derecho; y los funcionarios del ejecutivo que sellaron el municipio, argumentando que la Carta Orgánica, solo permite que el intendente interino a cargo realice cambios, si la firma de uno de los funcionarios en ejercicio acompaña el decreto.
Pero para que un funcionario consienta o no, la decisión de Nieve, las puertas del municipio deben estar abiertas; luego se podrá realizar la objeción. Pero aquel día Nieve fue insultada; denigrada en su condición de mujer y sometida a una hoguera de afrentas; donde cada epíteto era celebrado por la militancia; sobre todo la revelación de las supuestas consecuencias de su patología de base que habrían causado incapacidad para la toma de decisiones. Lo más grave, según el objeto de la Ley Micaela, la cual asegura la protección integral para prevenir, sancionar y erradicar la violencia contra las mujeres en los ámbitos en que desarrollen sus relaciones interpersonales, obligando a las autoridades de los tres poderes acumplir las disposiciones; es que fue una funcionaria con título de médica la que disparó el improperio “es una persona de mierda”, en referencia a Nieve.
Recordemos que, en el caso de la violencia contra la mujer, no hay grises, el Ministerio de las Mujeres, Géneros y Diversidad; el Instituto Nacional de las Mujeres (INAM) o un fiscal deben tomar intervención de oficio.
Para el día lunes, los sectores que apoyan la gestión de Gallardo; quienes no asumen la irresponsabilidad del intendente en ausentarse ilegalmente, cerrando el municipio para impedir que la Intendente a Cargo asuma la responsabilidad de conducir los destinos de La Quiaca hasta que Gallardo decida trabajar, porque hablar de recuperación sería mentir; según se desprende de la única certificación médica, la cual no recomienda ningún tipo de reposo, menos aún licencia médica.
El día viernes ha sido un día triste; se cometió un delito; sin que haya ninguna sanción; el objeto de la ley Micaela ha sido vejado; las autoridades del poder ejecutivo retroceden institucional y humanamente cada día.
Puntos para entender la situación
Gallardo no puede probar jurídicamente permiso por largo tratamiento.
Felisa Nieve posee facultades según lo establece la Carta Orgánica de Municipios, incluye la posibilidad de realizar cambios en el gabinete; ajustándose a estipulaciones ordenadas en la ley.
Ante la comisión de delitos flagrantes, varios funcionarios probaron su falta de idoneidad, condición necesaria para ejercer un cargo público en el estado argentino, en consecuencia, además de la sanción que merecen (violación a la ley Micaela), deben renunciar.
La institucionalidad se defiende en la justicia y en el marco del estado de derecho.