Con el acompañamiento del municipio, embarazadas y madres de la ciudad participaron del Taller PIN (Preparación Integral para el Nacimiento), una propuesta que une psicomotricidad, pilates y educación emocional para vivir el embarazo y el posparto con información, contención y movimiento saludable.
El crecimiento de las políticas de cuidado en La Quiaca dio un paso firme con la realización de un nuevo Taller PIN, impulsado por profesionales de la salud en coordinación con el municipio. La actividad, que se realizó con participación activa de vecinas embarazadas y puérperas, estuvo a cargo de la licenciada en psicomotricidad Luciana Sausa y de la instructora en pilates y reformer Lucía Valdiezo, quienes ofrecieron herramientas fundamentales para transitar el embarazo, el parto y el posparto con conciencia corporal y emocional.
“Trabajamos desde la unión entre cuerpo, emociones y vivencias. Esta etapa es profundamente significativa para cada mujer y es necesario desmitificar muchos tabúes que siguen presentes en nuestra comunidad”, expresó Sausa durante el encuentro, haciendo hincapié en que la maternidad debe vivirse con plenitud, no con temor.
Movimiento y prevención
Por su parte, Lucía Valdiezo explicó que los ejercicios se realizaron sobre colchonetas, sin necesidad de accesorios, haciendo foco en el suelo pélvico, la flexibilidad corporal y la respiración activa, elementos clave para el momento del parto. “También trabajamos para evitar la retención de líquidos, fortalecer el abdomen y la espalda, y preparar el cuerpo para una recuperación postparto más eficiente”, señaló.

Ambas profesionales coincidieron en que muchas mujeres aún desconocen que pueden —y deben— ejercitarse durante el embarazo, siempre con orientación profesional. “El movimiento es salud, y es posible en cualquier etapa gestacional”, remarcaron.
Participación activa, saberes compartidos
El taller contó con la presencia de mujeres primerizas y también de madres con hijos previos, quienes reconocieron que “siempre hay algo nuevo por aprender”. Las asistentes se mostraron agradecidas por el espacio de escucha, confianza y conocimiento. Entre preguntas, ejercicios y relatos personales, el PIN se convirtió en un espacio de empoderamiento colectivo.
“El cuerpo no solo cambia físicamente: se transforma desde adentro. Y por eso es tan importante acompañar desde un enfoque integral, donde el movimiento y la palabra vayan de la mano”, destacó Sausa.
Comunidad que cuida
La jornada reafirma el compromiso del municipio de La Quiaca con políticas públicas que atienden las necesidades reales de las mujeres, desde una perspectiva territorial, de género y con derechos. Desde la Dirección de Salud y las áreas vinculadas, se trabaja para repetir y ampliar estos talleres a lo largo del año, con el objetivo de fortalecer la red de contención materno-infantil.