En un encuentro sin precedentes, La Quiaca y Villazón consolidaron una visión compartida de cuidado ambiental, desarrollo productivo e integración social. El alcalde boliviano Juan Navia Llanos destacó el valor de la cooperación transfronteriza y reafirmó el compromiso de su municipio con el uso racional y soberano del agua en la cuenca alta del río Pilcomayo.
La ciudad de La Quiaca fue hoy escenario de una jornada estratégica y transformadora. En el marco de la Mesa Binacional del Agua de la Cuenca Alta del Pilcomayo, representantes de Bolivia y Argentina se reunieron con el objetivo de poner en común diagnósticos, urgencias y estrategias sobre el uso, protección y gobernanza del agua, en una región marcada por la crisis hídrica, la desertificación y el cambio climático.
Uno de los protagonistas clave del encuentro fue el Alcalde de Villazón, Juan Navia Llanos, quien, al frente de una delegación técnica, legal y legislativa, ratificó el liderazgo regional de su municipio en políticas de defensa del agua y destacó la voluntad política de avanzar con proyectos concretos junto a la ciudad jujeña.
“Villazón ha sido declarada en sequía. Estamos construyendo represas, perforando pozos, instalando reservorios. El agua es hoy el centro de nuestra gestión”, afirmó el alcalde.
Contaminación, aguas residuales y desarrollo social
Durante la mesa de trabajo, el jefe comunal boliviano expuso la preocupación creciente en las comunidades de su jurisdicción por la contaminación del río internacional, que atraviesa ambos países y constituye una arteria vital para la vida y la economía de la región. En ese marco, anunció el avance de un proyecto conjunto para el tratamiento de aguas residuales, con apoyo de la Gobernación del Departamento de Potosí y articulación técnica con autoridades argentinas.
“Tenemos la voluntad, tenemos el equipo, y tenemos la urgencia de encarar soluciones concretas. No se trata solo del río, sino de nuestras familias, de nuestros niños, de nuestra soberanía”, señaló Navia Llanos.
Agua, integración y valor agregado para los pueblos
El encuentro fue mucho más que técnico: se convirtió en una expresión palpable de la voluntad de integración entre pueblos históricamente hermanos, con vínculos migratorios, comerciales y afectivos indisolubles. En ese sentido, Navia Llanos suscribió las palabras del intendente de La Quiaca, Dante Velázquez, quien llamó a “darle valor agregado al desarrollo desde las comunidades y el territorio”.
“Compartimos una responsabilidad, no solo de gobernar, sino de sanar y proyectar. Las fronteras no son límites, son puentes. Y esta mesa binacional lo demuestra”, enfatizó el alcalde.
Un gesto político con proyección trinacional
La Mesa Binacional celebrada hoy busca ser reconocida oficialmente como parte de la Comisión Trinacional del Río Pilcomayo, para que sus propuestas y resoluciones tengan peso supranacional y puedan ser integradas a las políticas de Estado de Argentina, Bolivia y Paraguay.
Villazón y La Quiaca, desde su escala local pero con mirada continental, abren así una nueva etapa en la diplomacia del agua, donde el territorio toma la palabra, y donde los pueblos se colocan en el centro del debate por la vida, la justicia ambiental y el derecho al futuro.
“Estamos convencidos de que solo unidos podremos superar estos tiempos difíciles. Y el agua es símbolo y sustancia de esa unión”, concluyó Juan Navia Llanos, dejando un mensaje esperanzador que atravesó la sala y los corazones de quienes sueñan con un nuevo destino común en la región andina.